Qué es el marketing digital
Si queremos definir al consultor de marketing digital, lo primero que debemos hacer es definir el marketing digital como tal. Pues bien, se trata de la aplicación de estrategias de comercialización en medios digitales. También es definido como el marketing online y el objetivo es trasladar todas las técnicas offline al mundo digital.
En sus inicios era conocido como el marketing 1.0, que imposibilitaba la comunicación empresa-cliente, el mensaje era unidireccional. Se trató de una modernización de los métodos tradicionales al mundo online. En muy pocos años llegó el marketing 2.0 que supuso la revolución de la información al permitir un intercambio de mensajes prácticamente instantáneo. Internet pasó de ser un simple método de búsqueda a transformarse en una gran comunidad de personas con intereses comunes. Y actualmente nos estamos iniciando en el marketing 3.0 que va mucho más allá, la inteligencia artificial ha dado pie al desarrollo de gráficos 3D, enormes análisis de bases de datos, interpretación de complicados algoritmos así como la tecnología de la realidad aumentada.
El consultor digital
Ahora que ya conocemos un poquito más del marketing digital y de su historia es hora de que nos preguntemos por los expertos en este campo. ¿Quiénes son?
Es una figura relativamente nueva, no es extraño, puesto que es un campo que aún está por desarrollarse y está en continuo crecimiento. Son personas que te ayudan a transformar tu negocio a un plan de estrategia digital, es decir, gestiona tu proyecto de negocio en internet y le proporciona un valor añadido.
La formación del consultor
La mejor formación que puede tener un consultor digital ahora mismo son estudios superiores sobre marketing y una formación especializada en marketing digital. También sería interesante que tuviese conocimientos en temas informáticos, saber programar te ayudará bastante con el tema de las webs. No es imprescindible, pero sí deseable.
Experiencia
Actualmente en las entrevistas de trabajo nos preguntan habitualmente por la experiencia. Para un consultor digital es su portfolio y la manera de venderse. Es decir, si durante la entrevista muestras páginas web que tú mismo has diseñado sumarán puntos para que te contraten. Y si aun encima estas webs pertenecen a marcas de renombre prácticamente has conseguido el puesto. Además, cuando muestras tu portfolio la empresa contratante será capaz de medir si la campaña que tú mismo diseñaste para otra empresa funcionó o no.
Por supuesto, nadie nace sabiendo ni nadie nace con experiencia. Esta se va desarrollando a lo largo de nuestra vida profesional y por eso, al principio, tenemos que trabajar en nuestras habilidades.
Habilidades imprescindibles
La primera habilidad que nos gustaría destacar es la capacidad de comunicación. Puede que en tu mente tengas el plan perfecto, trazado a medida para tu cliente. Pero si no eres capaz de vendérselo y de darle razones para contratarte a ti y no a la competencia, no servirá de absolutamente nada.
Por otra parte, debe ser capaz de empatizar, especialmente si trabajas con empresas pequeñas. Adaptarse a sus necesidades, estudiar su plan de negocio como si fuese el nuestro y ponernos en la piel y principalmente en su bolsillo. Una transformación digital no es barata y no todo el mundo tiene la formación y el vocabulario técnico que tú sí. Así que ponte en su lugar y sé flexible.
Si no tienes capacidad analítica lo sentimos, pero probablemente este no sea tu puesto. Es tan importante porque una de las mejores ventajas del marketing digital es que es absolutamente medible y modificable en todo momento. Así que un consultor debe ser capaz de identificar cuanto antes si una estrategia no está funcionando y por qué.
El acompañamiento del consultor de marketing digital, de principio a fin
Si buscas un consultor que de verdad esté preocupado por que cumplas tus objetivos, te acompañará desde la construcción de tu empresa hasta el servicio post-venta. ¿A qué nos referimos con esto? A que el consultor estará desde que diseñes el nombre comercial y el logo hasta que tu cliente haya completado no solo la venta, sino el servicio post-venta. Además, debe asegurarse de que quede satisfecho.
¿Qué es el naming?
El naming es súper importante para nuestra estrategia comercial. Debe ser llamativo, único y distinto a los demás. El nombre debe ser original, pues de este dependerá el éxito de nuestra estrategia de mercadotecnia. Ten cuidado con el mensaje que quieres transmitir, lo que a tí te puede sonar bien, a otro no.
A través del naming se busca reforzar los valores de la marca. La labor del consultor en esta primera tarea será trabajar la imagen corporativa. El nombre debe coincidir con el plan estratégico proyectado para el producto y su plan de implantación.
Así que este deberá ayudar y acompañar a su cliente a buscar un nombre de estas características.
¿Cómo elegir el nombre perfecto?
El nombre comercial es muy importante, debemos buscar algo que sea fácil de recordar en la mente de nuestro cliente. Utilizar la psicología para conectar con este nos será muy útil. Ten cuidado con cómo suena en otros idiomas, puede que lo que a nosotros nos suene bien sea un nombre obsceno en otro idioma. Y esto puede arruinar nuestra estrategia.
Para facilitar que sea fácil de recordar nuestra recomendación y lo más descriptivo posible. Debe tener en cuenta la industria, actitud, enfoque y las metas del negocio. Además de ser corto, debe ser sencillo. Fácil de pronunciar.
Y sobre todo, ¡debe estar registrado! Hay muchas páginas que te permiten comprobar si tu dominio está disponible o no. De esta forma, serás capaz de comprobar si realmente tu nombre es único o no. Para registrarte, debes acudir a la Sede Electrónica de la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM). Las marcas y nombres comerciales se conceden por un periodo de 10 años y con este pequeño trámite impedirás que otros utilicen tu nombre comercial sin un consentimiento expreso.
¿Cómo afecta el servicio post-venta a la reputación de la empresa?
Supongamos que ya tenemos una empresa bien formada y hemos realizado la venta. Ahora queda la última y probablemente la parte más difícil. El servicio post-venta.
Este nos servirá para mejorar nuestra reputación, así como para fidelizar al cliente. Con una buena gestión de CRM será fácil identificar al cliente que ya ha realizado más de una compra o por el contrario aquel que ha realizado la compra una única vez.
Para mejorarlo se pueden utilizar estrategias como enviar notas de agradecimiento, asegurarse de que el producto y/o servicio ha cumplido con las expectativas e incluso ofrecer descuentos en una segunda compra. Básicamente se trata de cerciorarse de que el cliente ha quedado satisfecho y de que es probable que aumente la frecuencia de compra.
Los servicios del consultor…
Ya hemos visto todos los servicios que puede aportar un consultor de marketing digital. Lo mejor es que, cuando no tenemos conocimientos de este tipo, dejemos esta responsabilidad a auténticos profesionales. Nuestra reputación y notoriedad depende de ello.
La figura del consultor cada vez tiene más presencia y no es de extrañar, puesto que el mundo de internet no para de crecer.